jueves, 21 de octubre de 2010

VALORACIÓN SOBRE LA HUELGA FARSA DEL 29 DE SEPTIEMBRE

Tanto el sindicalismo alternativo como el subvencionado, califican como “éxito rotundo” la jornada de huelga del 29 de septiembre. Un primer paso habría sido lograr movilizar a una amplia mayoría de la clase trabajadora en torno a dicho sindicalismo, para avanzar hacia los objetivos marcados que son, en este caso, “echar abajo el plan de ajuste”. Esto es lo que habría sido un “éxito rotundo”.

Sin embargo, hemos asistido a un fracaso del movimiento obrero. Nunca ha habido tanta desmovilización y tanto descontento hacia dichos sindicatos, que se ha visto reflejado en el escaso seguimiento de la huelga, cosa de la que nos podríamos haber aprovechado, puesto que representa un pequeño acto de conciencia.

Tras esto nos encontramos con una clase obrera completamente desligada de la lucha por sus derechos más inmediatos y, por el contrario, una burguesía fortalecida apara seguir imponiendo sus próximas medidas antiobreras y antipopulares, es decir, apenas sin esfuerzo han aprobado y llevan aplicando dichas medidas durante años, y ahora se encuentran en condiciones aún mejores de dar una nueva vuelta de tuerca con la aprobación de la reforma de las pensiones, condenándonos hasta la muerte al trabajo y sin derechos. Ya es una realidad, nadie lo puede negar.

Ante esta situación seguimos apostando porque la única salida está en la Organización Independiente de la clase trabajadora y no tendiendo la mano una y otra vez a los sindicatos vendidos y subvencionados, como hace el pretendido sindicalismo alternativo; el boicot activo a sus instituciones y sus farsas, promoviendo a la vez la desobediencia civil y la resistencia.